28 de octubre de 2024

“Manga ñembosarái”: Esperan que la FIFA reconozca el origen guaraní del fútbol

El escritor y documentalista, Marcos Ybañez, entiende que San Ignacio Guasu debería ser declarada “Cuna Mundial del Fútbol” porque es allí donde se da el primer registro de un juego de pelota con los pies en todo el planeta. Con libros y películas sobre el tema, aquí nos cuenta del interés creciente de medios de la región en la hipótesis documentada de que los guaraníes inventaron el fútbol. También brega por el reconocimiento y la puesta en valor de los futbolistas indígenas en el país y en el continente.

En las tardes paraguayas cuando sol comienza a retirarse en los barrios se multiplica el juego de Piki vóley. Allí uno aprecia la destreza, la plasticidad de los jugadores, capaces de las piruetas más increíbles. Algo parecido a ello era el “Manga ñembosarái”, el juego precolombino de los guaraníes donde la clave del juego pasaba porque la pelota no cayera al piso.

Marcos Ybañez
“El fútbol es una de las invenciones fantásticas del mundo nativo que se hizo universal”, asegura el escritor y documentalista Marcos Ybáñez. Según viene exponiendo desde hace unos 10 años, “Inglaterra no fue el país que dio origen al fútbol, fue el que reglamentó, dos siglos después, porque ya se jugaba a la pelota con los pies en América. El mayor tesoro que llevaron de América durante la conquista y colonización no fueron sólo el oro y la plata, sino los saberes ancestrales en diversos campos de nuestras civilizaciones milenarias”, apuntó.

Ybañez, presidente de la Sociedad de Escritores del Paraguay (SEP) lucha para hacer conocer al mundo la historia del fútbol guaraní, aunque recuerda que “es una obra colectiva, porque conjuga el esfuerzo de todo un equipo para hacer posible las películas, el libro y finalmente la difusión de esta gran verdad”.

A su vez entiende que “es tiempo que la Conmebol impulse ante la FIFA los trámites para reconocer a San Ignacio Guazú como la ciudad del Fútbol. Quiero unir a toda una ciudad y un país en esta causa, porque existen registros documentales suficientes para hacerlo”, propone.

Espera que esta situación pueda verificarse a mediados de mayo del año entrante cuando Paraguay sea sede del 75 Congreso de la FIFA con la presencia de unos 2.500 asistentes, entre delegaciones internacionales, invitados especiales y leyendas del fútbol, medios de comunicación y público especializado.

Aquí su diálogo con Nación Media:

- Hay creciente interés en tus materiales sobre el origen guaraní del fútbol ¿contanos un poco?

- Por fortuna las obras logran un impacto muy importante a nivel internacional lo que nos compromete a seguir trabajando para el reconocimiento de la Federación Internacional del Fútbol Asociado (FIFA).

En estos días participamos con la poeta avá guaraní, Alba Eiragi Duarte, del desafío que nos propuso el periodista, Jorge “Chipi Vera”, de contar el origen indígena del fútbol, a través de registros de los sacerdotes en las misiones jesuíticas guaraníes. La entrevista fue difundida con buena aceptación del público en el primer capítulo del proyecto "Camino hacia la gloria eterna". Esta producción fue desarrollada en conjunto con 90 Minutes Media, y la Confederación Sudamericana (Conmebol)

- Tenés un libro y dos documentales hechos sobre el tema y en estos días te entrevistaron medios de Brasil, de Venezuela…

- …Si, con estas obras logramos la fusión de la literatura, el cine y el deporte. El arte es capaz de integrar las culturas, ahora, por ejemplo, camino al Mundial, la selección de Venezuela realizó tomas para un documental sobre su paso por Paraguay. La Agencia Denoda, que la acompaña me invitó a contar la historia del fútbol guaraní, la cultura paraguaya, y el uso de la lengua guaraní en las canchas. Valoraron el aporte del libro y la película “Manga Ñembosarái”, para comprender la pasión del fútbol en nuestro país y América. Compartimos en el Hotel Bourbon, de la Conmebol, un diálogo fraterno como es la esencia del fútbol arte en sus orígenes, integrando a los pueblos.

- ¿Cuáles son los primeros registros del Manga Ñembosarai?

- Este es un juego precolombino de la nación guaraní, registrado en las misiones jesuíticas de América, desde 1639.

Igual, sobre la historia del origen del fútbol existen varias teorías, el juego de la pelota está ligado a varias culturas. Los aztecas jugaban con la cadera, los europeos en esa época jugaban a la pelota con las manos y los guaraníes con los pies, en competencias de habilidad y resistencia con el juego del Manga Ñembosarái en las misiones jesuíticas guaraníes.

Nadie pone en duda que como un deporte con su estructura moderna lo reglamentó Inglaterra. Sin embargo, en el libro y la película recogemos testimonios y pruebas de investigadores muy serios como Bartomeu Meliá, el propio Vaticano, así como registros de sacerdotes de la época de las misiones jesuíticas guaraní, desde 1639, que señalan que el nació de los pies de los guaraníes de América.

-En esta hipótesis, ¿serían los sacerdotes los difusores?

- Si, fueron los sacerdotes de las misiones jesuíticas guaraníes quienes hicieron conocer el juego en Europa donde lo mostraron en las cortes.

A fines del siglo dieciocho en Italia, España, Portugal, Francia, nadie conocía todavía ese deporte, y fueron los misioneros jesuitas los que lo hicieron conocer como novedad y curiosidad increíble.

- ¿Cómo era más o menos el juego?

- Tenía ciertas reglas como por ejemplo que no había arcos, se declaraba perdedor al equipo que se retiraba por cansancio. El juego se practicaba todos los domingos después de la misa y podía durar hasta la puesta del sol. Hablaron del tema Ruiz de Montoya, José Cardiel y José Manuel Peramás.

En cierta forma este juego marca al fútbol paraguayo, porque es defensivo, de resistencia, aguerrido, que apela al empate 0 a 0. En la cancha hay una fuerte utilización de la lengua guaraní como estrategia para que el rival no entienda la estrategia de juego. La lengua guaraní nos acompaña en cada batalla cultural y deportiva.

Además, esta teoría se vio reforzada con los logros de la Selección Paraguaya Indígena, que salió campeón de América en Chile y Campeón del Mundo en Canadá.

- ¿De qué árbol se extraía el caucho con el que se hacía la pelota, cómo la llamaban?

- A la pelota la llamaban: Mangaí y el nombre viene del árbol que daba los nervios a la pelota, porque su fruta se llamaba Manga´a. Y por su parte, el mangaysy era la resina del cual se elaboraba la pelota para la práctica del fútbol. Está documentado que los guaraníes tenían una pelota de goma, hecha del caucho, que se llama mangaisy.

- Te acercaron nuevos datos a partir de la publicación de tu libro, del documental, ¿pensás en una segunda parte?

- Tengo dos documentales y el Libro sobre la historia indígena del fútbol: “Los guaraníes Inventaron el Fútbol”, hecho con investigadores y antropólogos como Bartomeu Meliá y otros. El segundo documental es Manga Ñembosarái que retrata la vida de la selección paraguaya indígena.

Es mi interés hacer una nueva película documental sobre la Ciudad del Fútbol, San Ignacio Guazú, porque como la primera ciudad misionera surgen más datos que la conectan con la creación del fútbol, gracias a los aportes de importantes investigadores locales como el juez y periodista Camilo Cantero y Margarita Ortiz.


- ¿Hay alguna gestión para consagrar a San Ignacio como una posible cuna del Fútbol?

- La Junta Municipal aprobó la ordenanza 39/2017 por la cual se declara a la ciudad “Cuna del Balompié Mundial” y en la memoria colectiva de sus pobladores aún perdura, pese al tiempo, los recuerdos del juego de la pelota con los pies de sus antepasados.

El mérito de los ignacianos es que han conservado y mantenido en el imaginario colectivo que allí, en las reducciones los guaraníes jugaban al juego de la pelota con los pies, conocido en el presente como fútbol, los domingos a la mañana. El valor del registro histórico. Si los jesuitas no lo registraban, hubiese sido mucho más difícil comprobar que este tipo de juego lo realizaron los guaraníes antes de la conquista.

Sería que la Conmebol impulse ante la FIFA los trámites para hacer efectivo este reconocimiento.

Una de las formaciones de la Selección Indígena paraguaya

- También seguiste de cerca la conformación de la selección indígena, ¿cómo sigue ese proceso?

- Pese a que los futbolistas indígenas salieron campeones del Mundo y de la Copa América, falta que el mundo del fútbol, los clubes y las selecciones, abran las puertas al mundo indígena. Es una deuda histórica con los inspiradores y creadores de este deporte.

Hay que poner fin al apartheid que sufren los futbolistas indígenas, en un mundo que los sigue discriminando. El fenómeno del futbolista indígena Luis Díaz, actual estrella de la Selección de Colombia y del Liverpool, de Inglaterra, nos muestra el camino a seguir.

El día en que veamos a los futbolistas indígenas siendo parte de los clubes profesionales y las selecciones nacionales de los países de nuestra América, podemos decir que algo comenzó a cambiar en la historia del fútbol frente a la discriminación que sufren en el mundo del deporte en las canchas y fuera de ellas.

 La Selección Paraguaya Indígena campeona del mundo, más allá de los reconocimientos coyunturales del Congreso y sendos discursos, sufrió un corte en el proceso iniciado, lo que pone en riesgo el futuro del fútbol nativo.



“Tendrá buena recepción”

Jorge "Chipi" Vera
Para el periodista deportivo Jorge “Chipi” Vera le parece “muy interesante” la idea de un reconocimiento de los órganos internacionales del fútbol a San Ignacio Guasu como “Cuna del Fútbol”. Recordó que “hay registros históricos muy ricos que comprueban esa teoría y ese relato. Sería espectacular que ese mensaje pueda amplificarse y que el mundo conozca esa historia”.

Para Vera, “es muy probable que tenga una buena recepción de parte de las autoridades del fútbol”. El autor de la muy viralizada cápsula para el programa 90 minutos auspiciado por Hyundai, sponsor oficial de la Copa Libertadores.

Expuso que la idea tendrá una nueva visualización cuando los representantes nacionales vuelvan a exponer temas de sus países el 30 de noviembre próximo en oportunidad de jugarse la final de la Copa Libertadores.

“Luis Felipao” Scolari nos encomendó la tarea de mostrar a Sudamérica y el mundo a través de ese mini documental, las bondades de nuestro fútbol y eso estamos”, recordó.

Mangaí, una pelota inflable

Según las documentaciones jesuitas, para fabricar la pelota, el Mangaí, lo primero que hacían los guaraníes de las Misiones era hacer una pequeña esfera de tierra colorada. Allí iban encimando capas de la resina del Mangaisí, que es pegajosa y parecida al caucho.

En un punto insertaban en la preparación una bombilla hecha de tacuarita, parecida a las que usaban para el tereré, y soplaban para hacer expandir la goma. De esa forma la pelota se inflaba y se conseguía que tenga un rebote muy particular que facilitaba las destrezas de los jugadores.

Así lo contó el jesuita catalán José Manuel Peramás en su libro “De vita et moribus tredecim virorum paraguaycorum” (Sobre la vida y el carácter de trece hombres paraguayos, en latín), publicado en 1793. “Solían también jugar con un balón, que, aun siendo de goma llena, era tan ligero y rápido que, una vez que lo golpeaban, seguía rebotando algún tiempo, sin pararse, impulsado por su propio peso. No lanzaban la pelota con la mano, como nosotros, sino con la parte superior del pie desnudo, pasándola y recibiéndola con gran agilidad y precisión”, sostuvo el sacerdote.

Además de las Cartas Anuas de los jesuitas, hay testimonios del juego “Manga ñembosarái” están incluídos en "Tesoro de la Lengua guaraní", diccionario escrito por el sacerdote Antonio Ruiz de Montoya en 1639 y también en el libro "Las Misiones del Paraguay", que el jesuita José Cardiel publicó en 1771.

El órgano oficial de prensa del Vaticano, “L’Osservatore Romano” publicó el artículo "Cuando los guaraníes inventaron el fútbol", durante el Mundial de Sudáfrica en el 2010. Allí se dieron a conocer fragmentos de algunas de las Cartas Anuas, que los jesuitas enviaban a sus superiores cada año, que llevaron a los redactores a concluir: "Tenemos un testimonio preciso e inequívoco que (…) una actividad singularmente parecida al fútbol moderno existía, no ya en tiempos remotos, sino con toda probabilidad en el siglo XVII e incluso a mediados del siglo XVIII. ¿Dónde? Precisamente en Paraguay. Y concluyó: "En resumen, los guaraníes de hace tres siglos seguramente ya jugaban al balón con maestría. En el fondo, (los paraguayos) son los descendientes de los verdaderos inventores del fútbol".

 Jorge Zárate

Links

Perfil de Autor: Marcos Ybáñez

https://www.youtube.com/watch?v=IWDkuL3rSMQ&t=284s&ab_channel=MarcosYba%C3%B1ez

https://youtu.be/NtjJ-qXrqlQ?si=MO6dtFG61FxC1uQz

L'Osservatore Romano

¿Quién inventó el fútbol: los ingleses o los guaraníes? - BBC News Mundo

Cuando el hombre empezó a patear una pelota cada domingo: la osada teoría que asegura que el fútbol es un invento guaraní - Infobae

https://www.instagram.com/reel/DBMrg2CJN94/?igsh=Z3I4aGJwMmdyYjVj

Paraguay será sede del 75° Congreso Ordinario de la FIFA – CONMEBOL 

21 de octubre de 2024

Coke Riobóo: “Es fundamental que nos eduquemos en lo audiovisual”

 
“Creo que es súper importante crear un espíritu y una conciencia crítica de las nuevas generaciones a través del audiovisual. Y que ellos también sepan leer entre líneas la información visual que les entra constantemente”, propone. Músico, compositor y animador, dirigió películas y comerciales y ganó un premio Goya, máximo galardón del cine español. Enseña animación en talleres alrededor del mundo y en estos días brindó unos en nuestro país.

Coke Riobóo

El director de cine de animación español, Coke Riobóo, desarrolló en las dos primeras semanas de este mes un importante taller de la técnica del stop-motion con singular éxito en el Centro Cultural Juan de Salazar.

“La animación foto a foto, para hacer mover objetos inanimados puede reflejar inquietudes políticas, personales y sociales y es un medio extraordinario para tratar temas comprometidos y espinosos con una variedad de técnicas”, definió el autor de “El viaje de Said”, corto ganador del Premio Goya en el año 2006.

En dicho taller ofreció un panorama de las herramientas tecnológicas y softwares profesionales existentes para la creación de piezas animadas; como crear los personajes, como crear los decorados con materiales variados y dio indicaciones para planificar un cortometraje y una introducción sobre la post-producción del mismo.

Aquí su diálogo con Nación Media:

- ¿Por qué elegiste la animación, cómo se dio tu proceso para usarla como medio de expresión?

- Empecé en el mundo de la animación por pura casualidad, trabajaba de músico profesional hasta el año 2000 y en el verano se suspendió una gira que iba a hacer con una banda y quedé en casa varado sin nada que hacer.  Así empecé a hacer pruebas con una camarita chiquita de vídeo. Y a partir de ahí, después de tres meses haciendo pruebas, realicé un primer cortometraje muy amateur muy casero que ganó muchísimos premios y bueno pues decidí que bueno pues que era una vía interesante para poderme expresar artísticamente porque daba salida también al gusto que siempre he tenido por el modelaje, por la pintura, por el dibujo... Y también la posibilidad de contar historias de una manera más profunda, real y exacta

Entonces, gracias a eso, empecé a trabajar, hice varias cositas muy amateurs, hasta “El viaje de Said” con el que gané el premio Goya. Y a raíz de ahí, pues ya la cosa fue rodada y empezaron a ofrecerme trabajos y a poderme mantener un poco como animador y como director en la industria.

- En un mundo tan audiovisual, la gente en mayoría consume memes y videos cortos de las plataformas sociales, ¿cuán importante es educarse en la construcción del relato visual?

- Pues creo que es importantísimo. Acá no sé cómo estará, pero allá en España todos los chavales tienen tablets, tienen teléfonos, pero no se da educación visual, alfabetización visual en la escuela. En parte yo creo que puede ser también un poco por mantener a la gente la ignorancia porque la incultura hace a las personas más maleables, más manejables.

Creo que es súper importante crear un espíritu crítico y crear una conciencia crítica de las nuevas generaciones a través del audiovisual. Y que ellos también sepan leer entre líneas la información visual que les entra constantemente. Es muy complicado porque lo que se consume, como dices, suele tener muy poca calidad y ser muy inmediato. Entonces luego cuesta mucho poder ver una peli de autor, películas que tengan ritmos diferentes a las de Marvel o las pelis de acción donde hay un cambio de plano cada dos segundos.

–¿Qué importancia te parece que puede tener este lenguaje a nivel social?

- Entonces formarse audiovisualmente es fundamental y, a nivel social, por supuesto, hay que reivindicar la herramienta audiovisual, en mi caso la animación, como medio también para denunciar ciertas situaciones sociales, económicas y políticas, de una manera amable, de una manera divertida o de una manera distinta, a lo que sería el expresarlo en medios de comunicación, ya sea en periódicos telediarios y esto.

-Vemos en “El viaje de Said”, una reflexión sobre las migraciones. ¿Qué repercusiones recibiste?

- En principio me permitió dedicarme a la animación. Es una historia que, a pesar de no ser marroquí, conté muy de cerca porque llevaba muchísimos años viajando a Marruecos. Cuando empecé a idearla en el 2000 y a realizarla en el 2005 el problema de la migración estaba muy fuerte, pero sobre todo era gente que migraba de Argelia y de Marruecos del Norte de África hacia España, por el estrecho de Gibraltar.

Todos querían cruzar, jugarse la vida y algunos de ellos murieron en el intento. Entonces esta situación me marcó muchísimo y decidí que tenía que hablar de alguna manera de este problema, pero no podía denunciarlo o hablar de ello de una manera, así como muy directa.

Entonces a través de un cuento casi infantil, un poco inspirado en el relato de Pinocho, de Carlo Collodi, traté de contar esta historia de una manera suavizada, con un toque de humor, negro a veces, un tanto también crudo y fuerte.

Tristemente, este problema no solo no desapareció, sino que ha ido creciendo y es aprovechado por ciertos sectores de la política más ultra para cargar las culpas de la economía y de la falta de trabajo en la migración, cosa que no es para nada. Es muy triste aprovecharse de personas con esta necesidad para hacer política de esta manera tan ruin y tan baja…

- Tuviste buenas devoluciones …

-… Si por suerte, estoy muy orgulloso porque desde el principio se estuvo proyectando en festivales sobre la migración, en eventos de ONGs y ahora mismo en España es una película que se utiliza en casi todas las escuelas públicas como material didáctico para hablar sobre estos temas, la xenofobia, el racismo, el miedo al otro, el miedo al de afuera. Es un material que compró el Ministerio de Cultura y por supuesto lo doné a Cruz Roja, a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y a todos los que trabajan con migrantes y siempre que me piden proyectarlo en algún tipo de evento de concienciación pues tienen licencia libre para usarlo.

- Entraste al cine por la música, según vimos en una entrevista. Otro tanto en la conmovedora “El ruido del mundo” ¿Qué rol juega tu oficio de músico en tus producciones, en el cine en general?

- Bueno, la música es el arma secreta y para mí juega un rol súper importante. Cuando creo mis historias, a veces parto desde la música hacia la animación y otras veces parto desde la animación a la música.

Para crear “El ruido del mundo” adapté un sistema que ya estaba bastante inventado, que es animar con partitura, darle una equivalencia a los fotogramas y a las corcheas y a las semicorcheas para poder encontrar la sincronía perfecta con los fotogramas. Esto me permitió poder afinar muchísimo y animar de una manera muy musical. Para mí es súper importante, compongo la música de todos mis cortometrajes, es casi un 30 o un 40% del resultado final de una película.

- Vimos que también hiciste videos educativos a partir del cine de animación ¿Te interesa particularmente este rol?

- ¡Muchísimo!, llevo años trabajando como profesor de animación. Desde los inicios de mi carrera tuve la oportunidad de ser maestro en la escuela oficial de cine de la Comunidad de Madrid. Y a partir de ahí también he seguido desarrollando muchos cursos por todo el mundo. He estado en varios países africanos, en Asia y por supuesto acá en Latinoamérica. Y casi todos de mano de la Agencia de Cooperación Española, del programa cerca y de otras modalidades de cooperación.

Creo que es darle una oportunidad a gente que no sabe cómo funciona esta técnica que se adapta muy bien a las posibilidades de cada persona. A gente que a lo mejor no sabe dibujar bien o no sabe modelar bien les permite hacer animación con objetos, con comida, con personas, con cualquier cosa que pueda ser susceptible de ser fotografiado.

Y entonces te permite abrir una puerta, una herramienta de expresión muy potente para la gente. Y sé que allá donde voy plantamos alguna semillita y luego, a lo largo de los años, veo cómo esa semilla va creciendo. Y estoy en contacto con muchos de los alumnos que he tenido a lo largo de estos 20 años trabajando con este tipo de talleres y de cursos. Y para mí es un orgullo ver que hay gente que va evolucionando y va consiguiendo unas películas y un nivel creativo muy potente

-Impartiste talleres en diferentes lugares de España y Latinoamérica, ¿Qué nos podés contar de esa rica experiencia?

- Para mí es fascinante el poder viajar alrededor del mundo y me ayuda también a ver un poco distintas maneras de crear, de pensar el imaginario común de cada lugar, en las tradiciones, la cultura oral que hay en ciertos sitios donde no hay tanta influencia de los más media y de las grandes corporaciones como Disney, como Pixar, como... Bueno, por las películas de Tim Burton, el manga y el anime japonés.

Y entonces ves sitios donde esa influencia no es tan fuerte y ves unas creaciones y un tipo de... De armar las historias muy, muy bonito. Yo aprendo muchísimo con estas experiencias. A veces diría que más que mis propios alumnos, lo que ellos me pueden ofrecer para ver una variedad tan amplia en haber estado en países tan distintos como Mozambique, Guinea ecuatorial, Etiopía, Egipto, Jordania, Irán, Turquía. Luego, en Latinoamérica, también estuve. Estuve en Cuba, Venezuela, México, por supuesto. Acá. Es mi primera vez en Paraguay. Y bueno, para mí ya le digo que es una experiencia fascinante y súper enriquecedora.

- ¿Cómo ves al Paraguay, su cine, encontraste algo particular en estos días que te gustaría destacar en torno a nuestras posibilidades?

- Bueno, he visto poco cine en Paraguay, yo te digo la verdad, he estado escuchando bastante música, folclórica, de fusión, fui al Festival Mundial de Arpa … He visto la película “Siete Cajas”, pero cuando regrese a España buscaré la música y el cine que me recomendaron para ver.

En lo que hace a los alumnos que he tenido en el taller les veo con muchas ganas y mucha pasión. Es verdad que hay un poco de falta de conocimiento acerca de esta técnica, pero sí que algunos ya conocían y que tienen una destreza especial.

Yo espero que acá también sirva para poder abrir aquí una puerta y bueno que empieza a despegar un poco más la animación paraguaya en la técnica de stop motion, aunque por supuesto ya había ejemplos.

Creo que hay mucho talento acá y que hay que explotarlo más y sobre todo estaría bien que el cine y en concreto el cine de animación tuviesen más ayudas para poder realizar estas películas, porque son procesos muy largos, que requieren de un poquito de esfuerzo y de ayuda monetaria para poder realizarlos.

Jorge Zárate 

Fotos de Christian “Gurú” Núñez y gentilezas

Links

coke riobóo – animación stop motion y música para cine (cokerioboo.com)

CCE Asuncion (juandesalazar.org.py)

https://youtu.be/Vj_uTysl3kI?si=0E7oORg5kVq9YA3j 


Un recuerdo de las hazañas de la juvenil de rugby en los años 92/93

 

Los jóvenes “Yakarés” se alzaron con dos campeonatos mundiales de la serie B de manera consecutiva, en un logro que nunca volvió a repetirse. Aquí tres protagonistas de aquellos torneos recuerdan esos días con nostalgia y alegría. También ofrecen sus puntos de vista para intentar ir por nuevas conquistas en el deporte.

Rodrigo “Mazizo” Torres, el popular conductor de “Animales de Radio” por FM Montecarlo, jugador de aquel equipo lo cuenta en primera persona: “Hablar de Madrid 1992 significa realmente algo muy especial para mí porque el campeonato mundial obtenido con la Sub 20 de la selección paraguaya de rugby es uno de esos regalos que te da la vida sin que te des cuenta y lo tenés que aprovechar a un 100%. La alegría llegó justamente cuando viene el pitazo final del partido que fue contra Marruecos y ahí es como que te cae la ficha de todo el esfuerzo”, recuerda.

Rodrigo Giménez fue el capitán del equipo del 92: “Es difícil hablar hoy en día, nosotros jugamos otro deporte prácticamente. El rugby en aquella época era amateur y nuestra preparación era muy distinta a la que es hoy. Pero sí como capitán te puedo decir que realmente lo que marca la diferencia en una cancha es lo que lo que puedas dejar dentro de ella. Nosotros éramos un grupo humano excelente y eso pudimos replicarlo dentro de la cancha, o sea dejábamos todo lo que teníamos, salíamos, ganábamos o perdíamos el partido, pero salíamos satisfechos de haber dado todo lo que podíamos”, resume.

Ariel Felippo también integró aquel team ganador: “Lo primero que me viene a la mente es lo confiados que fuimos a la gira y al torneo en nuestras habilidades y posibilidades de éxito. Creo que ese estado mental fue fruto del excelente proceso de preparación del equipo. Muy “caraduras” fuimos a ganar y se dieron los resultados”, dice.

Grupo humano y esfuerzo

Para los tres, la clave estuvo en el grupo humano y la gira de preparación que los consolidó táctica y técnicamente para afrontar la competencia.

Antes de arribar a Madrid, jugaron un importante partido de preparación en Bruselas contra la selección de Bélgica, para pasar luego a una gira por cuatro ciudades de Francia donde llegaron a jugar contra la juvenil de París. Cuenta Mazizo: “A partir de ahí nos fuimos a Madrid, de verdad, que es donde arrancó la historia y comenzamos a trabajar partido por partido, pero siempre con una fe y una confianza enorme en el equipo que en mayoría estaba integrado por jugadores de los pocos clubes que había en aquel momento que eran el San José; Curda; Old Kings; Santa Clara; Cristo Rey; Asunción, los clubes tradicionales en esa época”.

Rodrigo Giménez
Felippo recuerda que “el poder jugar juntos, entrenamos durante casi un año y la gira en Europa afianzaron al equipo no solamente rugbísticamente si no también como grupo humano. La combinación de esos factores con los excelentes preparadores técnicos que tuvimos Francisco Armadans, Alberto Daher, Carlos Zelarrayán y Jean Pierre Yuancich para mí fue la clave del éxito”, memora.

Para Giménez además del “grupo humano excepcional, sobre todo hubo una preparación muy especial y dedicada para lo que eran esos años en los que no existía el profesionalismo en el rugby”.

Orgullo y felicidad

Torres dice que “fueron jornadas maravillosas la que vivimos en cada partido, cada día que pasaba, cada compañero de habitación que teníamos en cada hotel diferente. Y, sobre todo, cuando estábamos recibiendo el premio como campeón de la categoría “B”, que te da derecho a ir a la categoría “A” donde están los Pumas (Argentina), Francia, Sudáfrica, entre otros. Y cuando nos llamaron para recibir la copa se pusieron de pie de las selecciones de Argentina y de Francia que fueron los finalistas de la A en aquel momento y comenzaron a aplaudirnos”, cuenta.

Ariel Felippo e hijo
Surge en el diálogo la pregunta de por qué no volvieron a repetirse actuaciones a ese nivel.

Mazizo entiende que “esas fueron muy buenas selecciones, las del 92/93 son camadas con muy buen rugby y la otra gran verdad es que nuestro rugby sigue siendo amateur”, por lo que la cuestión económica juega un rol.

Para Giménez “no pudo repetirse una hazaña como esta porque nunca más Paraguay preparó con tanto tiempo y con tanto énfasis equipos juveniles” y Felippo en coincidencia considera que “la falta de esos procesos largos, pacientes y continuos hizo que no se pudiera capitalizar. Hubo cambios en la dirigencia y mezquindades e intereses particulares desviaron la atención y no aprendimos de lo que hicimos bien (y mal)”.

Torres recuerda el apoyo del gobierno de Andrés Rodríguez que les facilitó un avión de Líneas Aérea Paraguayas (LAP) “en el que fuimos de Asunción a Dakar y de allí a Madrid y una vez que hicimos tierra en el aeropuerto de Barajas, toda la gira hicimos en tren normal, no el tren de alta velocidad que existe hoy día. Nosotros hicimos de Madrid a Bruselas en tren y de Bruselas a las cuatro ciudades que estuvimos en Francia, todo en tren, y en Francia volvimos nuevamente en tren a Madrid y ahí jugamos el Mundial. Y después volvimos en un vuelo directo”, memora.

A futuro

Al pedirles un diagnóstico sobre el presente Ariel Felippo entiende que se está “en un momento complicado. Desde la Unión de Rugby del Paraguay (URP) están haciendo esfuerzos para promocionar y mejorar en el nivel superior (selecciones y franquicia profesional) pero descuidando a los clubes y por ende nuestros semilleros”, considera.

“Para mí no es un problema de “jugador”, es de dirigentes. Así como para preparar un pilar, un medio apertura o un wing se necesitan aprender y entrenar habilidades específicas, también se deben enseñar y preparar a los dirigentes. Fortalecer a los clubes en su institucionalidad para que luego estos puedan desarrollar a las bases”, propone.

Para Rodrigo Giménez el rugby nacional “está bien en los últimos tiempos, pero está sufriendo un atraso de un abandono a nivel dirigencial de casi 20 o 30 años. Entonces la maquinaria recién se está empezando a mover y nos estamos poniendo a tono con lo que son los nuevos tiempos, con lo que son los planes de alto rendimiento, trabajar con las juveniles con más intensidad en la parte física, en la alimentación, en todo lo que implica un jugador en forma integral, que es la nueva onda que viene”, comenta.

“Creo que tenemos que fortalecer los clubes, donde la gente vaya al club a divertirse, a hacer amistades, a pasar un buen momento y desde ahí van a salir los chicos o los jugadores que realmente quieren hacer la carrera de rugby profesional. Son claves para captar jugadores, porque no todos los chicos tienen las ganas, las necesidades ni el hambre de volverse profesionales que implica entrenar prácticamente todos los días”, entiende.

Mazizo Torres coincide: “Creo que el gran secreto siempre va a estar en las inferiores que hoy están trabajando mucho. El rugby es hoy un deporte muy global ya que en nuestra época era Argentina, Uruguay y después el tercero mejor de Sudamérica era Paraguay o Chile. En los ´90 no existían Colombia, Brasil, Venezuela, pero hoy por hoy todos juegan y todos tienen un muy buen nivel. O sea, la vara hoy día está muy alta”, insiste.

“Algo muy importante que está haciendo la URP ahora es organizar torneos con algunas provincias de Argentina para que no seamos siempre los mismos equipos jugando entre nosotros. Se está jugando con equipos de Chaco, Corrientes, Misiones y Formosa y eso es muy bueno porque tenés un roce internacional, sobre todo con Argentina que es una cuna importante de rugby, es el país más referencial del deporte en la región y llegar a los logros que llegaron es bastante difícil”, concluye señalando.

Con la oreja “colgando”

Rodrigo "Mazizo" Torres
El campeonato mundial juvenil de Rugby de 1992 dejó un ramillete de anécdotas que suelen recrear los miembros del equipo campeón. Sin embargo, un episodio del juego final destaca a  Rodrigo “Mazizo” Torres que lo cuenta así: “Es muy diferente jugar acá que tener el roce con la gente de Europa y África, sobre todo dos equipos que fueron muy difíciles, Túnez y la final contra Marruecos, durísima. Faltaban 10 minutos para que termine el partido y en un “ruck” (formación en defensa de la pelota) quedé en el piso y recibí un pisotón en la oreja que prácticamente me la dejó colgando”.

A pesar del dolor, había que seguir en la disputa de la final: “Nunca había sentido un dolor tan importante como ese, no podía hablar, entraron los médicos y yo no podía responderles qué me pasaba…  Y ¿qué hizo el médico? ¿Qué decidieron los técnicos? Nada, en vez de cambiarme, me vendaron con cinta y el técnico francés me dijo que jugando el partido iba a estar más despierto…lo que hizo el técnico fue concentrar mi furia en seguir metiéndole puro huevo el resto del partido hasta que terminamos y salimos campeones”, apunta.

“Festejamos un poco y me tuve que ir al hospital para que me cosieran, me vuelvan a colocar la oreja, mientras la mayoría de los perros estaban afuera esperando, aplaudiendo, tirando fuerzas”.

Jorge Zárate

Dos equipos ganadores

La selección M19 de 1992, viajó por invitación de FIRA (Federación Internacional de Rugby Amateur) a Madrid, España, a participar del 24.º Campeonato del Mundo Juniors, en la categoría B (en la categoría A se encontraban equipos de gran calidad como Francia, Argentina, Italia, España, Uruguay y otros).

Jugaron contra Suiza, Túnez, Andorra y la final contra Marruecos y se consagraron Campeones por primera vez para el Paraguay.

Integraron el equipo Jesús Mereles (pilar), Jorge Reyes (hooker), Rodrigo "Mazizo" Torres (pilar), Juan "Anchi" Campos (2.ª línea), Ramon "Monchi" Amarilla (2.ª línea),Rodrigo "Melón" Giménez (Capitán y ala), Leo Cuevas (octavo), Pedro Gutiérrez (ala), Gabriel "Negro" Riveros (medio scrum), Nestor "Caio" Arrua (apertura), Pablo Pappalardo (inside centro), Oscar "Cacheto" Cano, Vicente "Vico" Martínez (wing), Hugo Torales (2 wing) y Rodrigo "Uru" Volpe. Diego Ermakoff, Nicolas Urrutia, Ariel Felippo, Gustavo Doldan, Rodolfo Bittar, Julio Lovera, Santiago González, Angel Borja, Ricardo Ovelar, Christian Noguera, Víctor Páez, Julio Cardozo, Nelson González.

Un año después (Francia - Lille - 1993), la FIRA reestructura su 25.º Campeonato Mundial de Rugby M19 creando las categorías B2, B1 y A. Paraguay permaneció en la categoría B1; y, con una gran mayoría de jugadores protagonistas de la hazaña anterior (1992), nuevamente llegó a la final cayendo ante el equipo de Bélgica, que tiempo después fue despojado del título por haber falsificado las edades de algunos jugadores, con lo que Paraguay se quedó nuevamente (y en forma consecutiva) como Campeón Mundial de la categoría B1. La actuación (Francia - Lyon - 1994), fue también muy destacable, donde Paraguay consiguió un 4.º lugar. Luego de esos tres "Años dorados" de la selección Juvenil M19, Paraguay no ha conseguido otro logro internacional como estos.

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Selección juvenil de rugby de Paraguay - Wikipedia, la enciclopedia libre

14 de octubre de 2024

Maaneng, la mirada propia de una fiesta ancestral chaqueña

 

Hasta el 17 de octubre próximo se puede ver en la Alianza Francesa la muestra del fotógrafo Lanto’oy Unruh, un primer registro de las festividades de las comunidades Enlhet y Toba-Enenlhet, todo un hito histórico para ellos. Esta iniciativa, impulsada por el artista, la chef Rosa López y Manolo Romero, representa no solo un testimonio visual, sino también un esfuerzo por preservar y revitalizar las tradiciones de un pueblo que enfrenta desafíos en la conservación de su herencia y clama por su visibilización. 

Lanto’oy Unruh y algunas de las fotos en exposición

Ella está envuelta en collares en una imagen conmovedora en la que se ve a la niña con el maquillaje ritual esperando que, la ceremonia que encabeza la abuela, le abra el paso a ser considerada una mujer.

Una vez cumplido el ritual, ocurre el Sevalaq o Savalak, dependiendo la etnia chaqueña que la nombre, una danza que corona la celebración en la que hombres pintados, cubiertos por máscaras emplumadas, convocan lo mejor para ellos y los suyos.

Ya después se celebrará el Maaneng, la fiesta total del pueblo en la que todos bailan abrazados agradeciendo la vida.

Las imágenes recrean la fuerza de los movimientos que “construyen unidad y hacen a la conexión intergeneracional”, según relata el autor que trabajó de muy cerca, logrando importantes primeros planos de gran expresividad.

Fueron producidas en enero de este año, cuando el fotógrafo Lanto’oy Unruh registró el Maaneng, de la comunidad Toba Maskoy de Casanillo, Presidente Hayes, organizó para celebrar una ceremonia de iniciación de mujeres, rito que se da cuando las menores cumplen 15 años.

Al verlas en gran tamaño, surgió la idea de montar “Maaneng: Una festividad de Saberes y Sabores Ancestrales”, muestra que está habilitada en la Alianza Francesa, sita en Mariscal Estigarribia 1039 de esta capital, hasta el 17/10.

Visibilización

Unruh que es también pintor, ilustrador digital y diseñador gráfico, entiende que esta primera muestra individual tiene la virtud de ayudar a su pueblo a “visibilizarse”.

Es que en Yalve Sanga, Boquerón, la comunidad en la que reside, actualmente luchan para que el gobierno los asista con agua, porque los camiones de 20 mil litros que envían esporádicamente para atender la emergencia, no alcanzan a llenar los más de 60 aljibes que tiene la comunidad ubicada a 30 kilómetros de Loma Plata, a 429 de esta capital.

“Tomamos el agua de tajamares y eso, pero se está acabando, tenemos un agua muy mala, parece chocolate y los niños se enferman después y... ¿Qué podemos hacer? Llegan las cisternas, pero ya enseguida terminan”, describe Lanto’oy. La situación es más que difícil hoy para las 2.100 personas que habitan Yalve Sanga y lo propio le pasa a la vecina Pozo Amarillo.

Cuentan que antes tenían cultivos, pero que las frecuentes temporadas de sequía le imposibilitan seguir desarrollando una agricultura de subsistencia. “Hay un poco de ganadería en la comunidad”, cuenta explicando que la mayoría trabaja en estancias de la zona para poder mantenerse, aunque en general las tareas son de temporada.

“Le pedimos al gobierno que esté para nosotros, por las necesidades que hay en nuestras comunidades, principalmente el agua, que es la vida”, insiste.

“Invito al público a valorizar la tradición de los pueblos indígenas eso es lo más importante para nosotros. Porque siempre hay discriminación y eso. Somos seres humanos, merecemos consideración y respeto de nuestros derechos”, reclama.

Agradecimientos

Lanto’oy agradeció especialmente a Manolo Romero del Colectivo Ennengko’o, escritor de la comunidad Pozo Amarillo, Toba-Enenlhet y a la chef, Rosa López, especializada en alimentos tradicionales que estudia en Francia y es gran promotora de los ingredientes chaqueños.

Romero recordó: “Nuestra cultura perdurará mientras mantengamos vivas nuestras tradiciones”, dijo el gestor cultural que estuvo a cargo de los permisos para que el registro se lleve a cabo y que la exposición sea una realidad.

Unruh insistió en que lo motiva “que mi pueblo Enlhet y los Toba-Enenlhet sean verdaderamente reconocidos. Sueño con que esta exposición viaje a otros lugares, a museos, para que más personas puedan conocer nuestra historia, no solo como un evento único, sino como una parte constante de nuestra identidad cultural. Mi pueblo ha sido invisibilizado durante demasiado tiempo; es momento de mostrar al mundo la belleza, la fuerza y la dignidad de nuestros pueblos originarios. A través de estas imágenes, quiero que el mundo vea quiénes somos realmente: cultura viva, resistencia y belleza que trasciende el tiempo", apuntó.

Sabores tradicionales

Raíces Vivas es un colectivo de personas “que trabajamos en el rescate de los recursos culturales que tenemos en el país y gestamos esta exposición principalmente en torno a los saberes y los sabores ancestrales, porque también trabajamos con alimentación, ya que en estas fiestas se bebe chicha y se comen también alimentos tradicionales y aquí también están presentes productos elaborados con esos alimentos como por ejemplo ají del monte, también la harina de algarrobo, y otros frutos como el de la tuna, el mistol”, comentó Julia Pineda, de la organización.

Los productos de Tucos Factory, una empresa que les compra a las comunidades indígenas sus producciones y elabora mermeladas de Mistol y Tunas, por ejemplo, aparecen expuestos en la muestra que también reúne arte plumario y cestería de los pueblos Enlhet y los Toba-Enenlhet.

Pineda dijo estar agradecida “a los Fondos de Cultura 2024 por apoyar este proyecto y otros más que vienen en camino. Y que esperamos a todas las personas que vengan a conocer estas culturas, porque este es un primer registro de esta festividad desde la mirada local de quienes son parte de estas tradiciones”.

Hablando sobre el tema, Adeline Friesen Wiens responsable de Tucos Factory contó en una entrevista a Nación Media que se trata de “una empresa pequeña” que le permite “comprarle a las comunidades y hacer más visibles los productos para que puedan crecer las actividades en torno a las frutos del monte chaqueño”, resumió. “Trabajamos con mujeres indígenas urbanas de Filadelfia, que son las que elaboran las mermeladas, por ejemplo. También hacemos harinas de algarroba y procesamos el ají del monte. Si tenemos suerte este año estaremos elaborando entre 10.000 a 12.000 frascos de mermeladas”, contó. “Por el momento, la mayor venta es en Filadelfia, donde vendemos en pequeños locales desde 2020 y recién hace seis meses estamos en supermercados como Casa Rica o Los Jardines. Nos falta trabajar más en el marketing para que puedan conocer trabajos y productos que estamos elaborando y hacer saber que cada producto que vendemos mejora la calidad de vida de estas mujeres que integran un grupo con mucha vulnerabilidad”, apuntó en la oportunidad.

Intercambio

Para la chef, Rosa López, especializada en alimentos tradicionales que estudia en Francia y es gran promotora de los ingredientes chaqueños "explorando las culturas ancestrales de nuestro país, comprenderemos lo profundo de nuestra herencia cultural. A través de este hito histórico, esperamos construir puentes entre culturas y fomentar un diálogo intercultural que enriquezca nuestra sociedad", apuntó.

López, una de las organizadoras de la muestra, consideró luego que “en un mundo donde la globalización amenaza la diversidad cultural, esta exposición emerge como un faro de esperanza y un recordatorio de la riqueza que aportan las culturas indígenas. A través de imágenes cautivadoras, el proyecto busca honrar y visibilizar los saberes ancestrales de los pueblos Enlhet y Toba- Enenlhet, destacando la importancia de la transmisión intergeneracional del conocimiento, la danza Maaneng, y la espiritualidad que impregna cada celebración”.

Jorge Zárate

Fotos de Néstor Soto y Lanto’oy Unruh

Una comunidad modelo

En Casanillo, donde Lanto’oy Unruh tomó las imágenes de la muestra, el pueblo Toba Maskoy, también conocidos como Enenlhet, trabajan en forma comunitaria y asociativa para el sustento de sus familias.

En dicha comunidad, ubicada en el distrito Teniente Irala Fernández, departamento de Presidente Hayes, a 390 kilómetros de Asunción, los indígenas entre todos crían vacas, que es una práctica histórica en el Chaco paraguayo.

Tienen escuela, unidad de salud familiar, caminos, corrales, alambradas, tractores y camiones comunitarios y un almacén de consumo. También se destacan por la organización de sus mujeres que ayudan en las iglesias, comisión de salud, de educación en los consejos comunitarios y en el trabajo social que se practica.

Es fundamental la tarea de la radio comunitaria 90.3 FM, que transmite en su lengua y poseen un campo deportivo para la recreación y la integración.

Gran parte de la historia está recopilada en el libro “Toba Maskoy, en busca de la liberación” que fue el primero de narrativa del escritor indígena Luis Leiva, su autor, la primera en prosa presentada por un indígena en el país en marzo de 2021.

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Lanto'oy' Unruh - Artista Visual. (@lantooyunruh) • Fotos y videos de Instagram

Luis Leiva y la historia de la comunidad Casanillo - Espectáculos - ABC Color 

Nengvaanemkeskama Nempayvaam Enlhet

Pachín Centurión, un trovador en gira para historiar la guarania

 

El músico y gestor cultural realizará un concierto y diálogo con el público bajo la máxima de “Conociendo a Flores y sus guaranias”, que se podrá apreciar en distintos escenarios del país. En el espectáculo, además de la audición de las obras más representativas de José Asunción Flores, se podrá conocer más sobre la vida del compositor y el proceso de gestación de su aporte más significativo al folclore paraguayo.

“No hemos podido saber qué pasó con la partitura de Jejuí”, cuenta Pachín Centurión, trovador, gestor cultural, que comenzó esta semana una mini gira de difusión del origen y consolidación de la guarania, la excelsa obra de su admirado José Asunción Flores.

Recuerda que “Jejuí” vio la luz “en el año 1925 y la composición era instrumental. Flores tenía 21 años y fue ejecutada en público solo dos veces, luego misteriosamente la partitura se perdió, estaba escrita para un trío de piano, violín y cello”, apunta en diálogo con Nación Media.

Este y otros datos históricos se aprecian en el espectáculo "Conociendo a Flores y sus Guaranias" de Pachín que comenzó este 11/10 en el Centro Cultural Arasa de Caacupé.

En él, Centurión con su inseparable guitarra, realiza una interpretación cronológica de 14 guaranias de Flores: 1. Arribeño Resay,  2. Ka Aty , 3. India, primera versión, todas con letra de Rigoberto Fontao Meza, 4. India, segunda versión, 5. Paraguaype, 6. Nde rendape ayu, 7. Panambi, 8. Kerasy, todas con letra de Manuel Ortiz Guerrero, 9. Ñasaindype, 10. Nde Ratypykua, ambas con letra de Félix Fernández, 11. Che pycasumi, letra de Carlos Valiente, música de Eladio Martínez y Flores, 12. Ñemity 13. Guyra'u, ambas con letra de Carlos Federico Abente, 14. Arribeño, versión con letra de Augusto Roa Bastos.

Malena Bareiro y Pachín Centurión
"La idea es apoyar el proyecto para que la Guarania sea declarada Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por las Naciones Unidas", dice entusiasmado el co creador, junto a su compañera Malena Bareiro, del Centro Cultural La Chispa.


Un corazón de pueblo

Centurión resume sus estudios y su presentación: “Flores, se percata que está nueva música se iba a adentrar en el espíritu, por lo que entiende que debía tener letra para que pudieran cantarla los músicos populares y el pueblo. Compone entonces cuatro Guaranias en esos años juveniles. "Arribeño Resay", la primera Guarania con letra, "India", la primera versión, y "Ka'aty", todas con letra de Rigoberto Fontao Meza. Y "Ñasaindype", con letra del poeta y músico Félix Fernández”, explica.

“Esto en los años 1925, 26, 27 y 28. Cuando la Guarania ya comenzaba a ser conocida y cantada y ya en 1929 se produce el encuentro entre Flores y el gran poeta Manuel Ortiz Guerrero que fue fundamental porque se dan hermosas piezas en la creación conjunta”, explica.

“Flores al crear la Guarania como un género nuevo ya pensaba en elevarla a la Sinfonía, creando una composición abierta. El aliento de Ortiz Guerrero fue fundamental sobre todo para que fuera a Buenos Aires, a efectos de seguir su sueño y sobre todo porqué en Paraguay comenzaron los envidiosos de siempre a cuestionar la autoría de la creación de la Guarania. Ortiz Guerrero muere en mayo de 1933 y dos semanas después arriba a Buenos Aires el Maestro”, apunta.

Sinfonías para la tierra

“Ya en la Argentina Flores intenta grabar sus creaciones, funda la Orquesta Ortiz Guerrero, con músicos paraguayos, argentinos e italianos, donde se encuentra con Oscar Clérici, que fue otro compatriota crucial para la evolución de la Guarania”, cuenta Pachín de esta etapa fundamental para la consolidación del nuevo género musical.

“Después de ser rechazado por las grandes disqueras RCA Víctor y Odeón; Clerici decide solventar la grabación, pagando el primer disco con las guaranias de Flores y de otros compositores paraguayos”.

“A partir de allí Flores comienza a estudiar y a componer sus poemas sinfónicos, elevando sus Guaranias a la Sinfonía estudios que son estrenados con coro y orquesta en Rosario y Córdoba. La tercera etapa en la evolución la constituirán las grabaciones de sus obras por la Orquesta Sinfónica de la Radio y Televisión de Moscú en los años 1967 y 1969 realizando su sueño”.

Distintivo en el mundo

Pachín recuerda que “la Guarania es un nuevo género inspirado en la música folklórica, pero cuyo creador se conoce. Es uno de los pocos casos en el mundo, también la Bossa Nova en el Brasil, cuyos autores se conoce. En la época muchos grandes músicos internacionales, dentro de las llamadas Escuelas Nacionales, compusieron obras inspiradas en el folklore de sus países, pero no constituyeron nuevos géneros musicales. Por ejemplo, Manuel de Falla en España, Antón Dvorak y Bedrich Smetana; en Bohemia, Checoslovaquia, Federico Chopin en Francia, Modesto Mussorgsky en Rusia y otros”, recuerda el historiador musical.

“Lo bueno del caso es que la Guarania se constituyó en la música del Paraguay y en menos de un siglo fueron compuestos centenares de obras y el género fue reconocido internacionalmente a pesar del poco apoyo oficial”, concluyó recordando.

Dónde verlo

La segunda fecha de la gira "Conociendo a Flores y sus Guaranias" a cargo de Pachín Centurión,  que tiene acceso libre y gratuito, será el sábado 19 de octubre desde las 18 hs. en el Galpón Estudio - Ypacarai Films - Tito Chamorro, al lado de Highland Park & Lagoon, en el desvío a San Bernardino, a 1 Km. y 1/2.

Siguiendo con la tarea, la tercera cita será en la Fundación El Cántaro, Areguá, el sábado 26 de Octubre a las 10 hs, abierta para el público en general y en especial para los alumnos de la institución.

Todas las funciones cuentan con auspicio del Fondo de la Cultura (FONDEC)